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En el presente año de mil novecientos tres, a los ocho días del mes de Diciembre se formó la primera junta para deliberar respecto del lugar donde debería edificarse un Santuario Dedicado a la Santísima Virgen de Guadalupe.
Y para que conste lo firmé.
Pbro. Ygnacio Luis Najera. Rubrica.
En la segunda junta que se verificó se propusieron algunos terrenos a propósito y se aceptó un solar del Cerro de la Cruz perteneciente a la familia Estevané y don Santiago Estevané, de conformidad con los demás dueños, cedió el terreno indicado, y para que conste lo firmé.
Pbro. Ygnacio Luis Najera. Rubrica.
En la tercera junta se acordó pasara el que suscribe acompañado de don Santiago Estevané a recibir el terreno indicado y asiendo de Ingeniero asentó el trazo y capacidad que debería llevar el Templo. Procediéndose a la apertura de los cimientos y en el resto del año se formaron comisiones para crear fondos, y se dio principio en febrero del año de mil novecientos cuatro. Se procedió al acarreo de materiales; como piedra, arena y se mandaron hacer ocho mil adobes como principio y se estuvo trabajando en el acopio de dichos materiales hasta fines de marzo del año indicado. Y para que conste lo firmé.
Pbro. Ygnacio Luis Najera. Rubrica.
En el siglo XX, a los tres días del mes de abril del año de mil novecientos cuatro, siendo Arzobispo de la Arquidiócesis de Durango el Ylma. Y Rmo. Sr. Dr. Don Santiago Zubiria y Manzanera con su aprobación el Cura Párroco Pbro. Ygnacio Luis Najera pasaron al Cerro llamado de La Cruz, a bendecir la primera piedra en unión de su Teniente Pbro. Don Luis Bocardo, quien toma parte activa en la edificación de una Yglesia dedicada a la Santísima Virgen, lo mismo se dice de los Sres. Padrinos y de los demás fieles e hijos de esta parroquia de San Miguel del Mezquital; pues en todos se ve el entusiasmo y devoción cristiana que fue unánime en el Solemne Acto que empezó a las cuatro de la tarde según la invitación que se hizo.
Se leyó esta y la aprobación de la Sagrada Mitra, y por último todo lo anterior firmaron; el Señor Cura su Vicario , los Padrinos y demás fieles hasta donde fue posible, encerrando en un frasco y en el mismo cimiento, ésta constancia de la cual existe en el Archivo la original integra que es la presente.
Pbro. Ygnacio Luis Najera. Rubrica.
Para lo anterior e importante ceremonia , se pidió a la Sagrada Mitra el debido permiso y autorización y por tanto concedida se practico. Y para que conste la firmé. A los ocho días del mes de abril. (79
Pbro. Ygnacio Luis Najera. Rubrica.
Desgraciadamente para esta Parroquia de San Miguel, el Sr. Cura Pbro. Ygnacio Luis Najera, entregó su alma al Creador a las dieciséis horas del día doce de agosto del año del Señor 1931 en la Metrópoli de este Arzobispado de Durango, México. (80
EL SANTUARIO
EN LA GUERRA CRISTERA.
La Constitución de 1917 otorgaba al Estado el derecho de administrar la Profesión Clerical; la Iglesia se encontraba en la misma situación Jurídica que antes de la Independencia.
En febrero de 1925 Luis N. Morones el todo poderoso de la Confederación Regional Obrera Mexicana (CROM), Había Tratado de instaurar una Iglesia Mexicana Cismática, separada de Roma, pero fracasó. A partir de esa fecha se inició la guerra que después se conocería como Guerra Cristera o Cristiada.
Tomaría este nombre por el grito de guerra que los soldados del pueblo hacían: ¡Viva Cristo Rey y la Virgen de Guadalupe!.
A principios de 1926, Plutarco Elías Calles Presidente de la Republica hizo aceptar, so de la Reforma del Código Penal, una legislación que asimilaba a los delitos de derecho común, las infracciones en materia de Cultos.
Cuando la nueva Ley entró en vigor, los obispos mexicanos suspendieron el culto publico en respuesta, esto ocurrió el día 31 de julio de 1926. Es domingo 1º de Agosto y las campanas de San Miguel del Mezquital y de todo el País se encuentran mudas, los templos vacíos y el pueblo está privado de sus sacramentos. No se puede decir Misa, bautizar al niño, contraer matrimonio, comulgar. Ayer la Iglesia Católica decidió suspender el culto como respuesta a las medidas anticlericales que el gobierno de Plutarco Elías Calles a puesto en marcha desde Febrero, cuando se publicaron unas declaraciones del Arzobispo José Mora y del Río en contra de la Constitución, hechas nueve años atrás, pero refrendadas.
En estas palabras el Presidente Calles encontró un desafío para su gobierno, especialmente a lo que se refiere a la educación laica y la regulación de las iglesias. Desde entonces han sido cerradas escuelas y conventos, también fueron expulsados cerca de 200 sacerdotes extranjeros.
Ahora el culto se realiza de manera clandestina, por que el gobierno prohíbe que sea particular. El efecto de esta medida resulta intolerable para una gran parte de la población, especialmente en el campo, y la rebelión armada estalla en el mes de Enero de 1927, cuando grupos de católicos se levantan contra el gobierno al grito de “¡ Viva Cristo Rey y la Virgen de Guadalupe!”, animados por la Liga Nacional de la Defensa de la Libertad Religiosa, y posteriormente comandados por el antiguo oficial federal Enrique Gorostieta. La lucha se concentra principalmente en Jalisco, Nayarit, Zacatecas, Durango, Guanajuato, Colima y Michoacán. Con una fuerza calculada en 12000 hombres para 1927. El programa que anima la revuelta se conoce como constitución cristera, con la que se pretende reemplazar, la Carta Magna de 1917.
Un año más tarde en 1928, Plutarco Elías Calles y los representantes del episcopado sostienen una serie de entrevistas para resolver el conflicto, pero fueron interrumpidas por el asesinato de Álvaro Obregón. Los contactos se restablecen en 1929 durante la presidencia de Emilio Portes Gil y con la intervención del embajador de los Estados Unidos. Como resultado el 30 de Junio la Iglesia accede a reanudar los servicios religiosos, y por su parte, el gobierno se compromete a aplicar las leyes con un espíritu conciliador.
Empero hubo de pasar una década antes de que la violencia desapareciera por completo. (81
Fue entonces que la Capilla, dedicada a Nuestra Señora de Guadalupe fue olvidada como la Casa para lo que se construyo.
Ahora los soldados federales como los cristeros, tomaban la Capilla, cuanta oportunidad se les presentaba, sino para corral donde encerraban sus caballos y pertrechos de guerra, la tomaban como trinchera o fortín, por ser un resguardo seguro y efectivo para ambos bandos, ya que se encuentra situada en un punto estratégico para la defensa o el ataque. La Capilla situada en la cúspide del Cerro de la Cruz, de allí se divisaba la Villa de San Miguel del Mezquital en toda su extensión, de allí era también efectiva la visibilidad a los cuatro puntos cardinales.
Entonces la Villa de San Miguel del Mezquital era pequeña, sus limites por el Norte hasta el Panteón y la Alameda, y se seguía por todo lo que es la calle Insurgentes hasta las huertas del Barrio la Liebre, hasta la última Huerta que es la de Secundino Gamón, por esta misma ruta se iba a San Juan del Mezquital ( hoy Juan Aldama, Zac.), por la Barranca del Muerto, siendo este el camino que acercaba más a los dos pueblos, yendo a pie, caballo o en burro.
Desde el puente de la Guerrero de el Arroyo el Derramadero y de la calle Insurgentes todo el Noreste era un gran mezquital muy tupido; al Sur el Barrio de Chapulines, lo limitaba el camino Real (hoy Calle González Ortega), que pasa el Arroyo las Lajas por su puente de piedra construido el año de 1915, este camino desemboca en la que hoy es la Av., Juárez que lleva al Cerro del Picacho más conocido como el de “Viva Jesús”. Siguiendo el mismo Camino Real ( por la González Ortega, cruzaba la Av., Juárez para conectar con la famosísima Calle Real de Colotlán (nombre compuesto por dos vocablos Náhuatl y son : Colo- pinos o árboles; tlán- cerca de. Que literalmente quiere decir , cerca de los pinos o árboles), esta calle se sigue hasta dar vuelta para lo que fue el primer caserío de la Villa, el famosísimo “Barrio de España”, de allí al Cerro de la Rueda que es donde daba vuelta el camino para ir a Río Grande; al Este el caserío, llegaba hasta la parte media, entre los dos arroyos, el de la Plata o Derramadero y el de la Boquilla, por lo que el Cerrito de La Cruz donde se encuentra el Santuario quedaba a extramuros de la Villa; al Oeste, llegaba a dos o tres cuadras antes del Calvario o de los tiros de las minas, a una cuadra atrás del Jardín Hidalgo.
Siendo por esto el Santuario un sitio difícil de tomar, tantos combates se suscitaron allí que la capilla fue casi demolida, sin techos y sus paredes todas agujereadas y en partes derrumbadas, ya para fines de la Guerra Cristera, la Sagrada Casa dedicada a Nuestra Santísima Madre de Guadalupe servía como majada, corral y baño, tapaban sus agujeros, puertas y ventanas rusticas, denigrantes puertas de alambre de púas y palos viejos, pencas de nopal y ramas de mezquite.
El cuadro que guardaba la pintura retrato de la Santísima Virgen de Guadalupe, había sido retirado de allí y almacenado en la sacristía de la Parroquia de San Miguel, sacristía que en una ocasión se inundo quedando la pintura dentro del agua, por lo que la parte de abajo de la pintura casi se borro, parte de la luna y el querubín , también se borro la firma de su autor, pero ya se sabía que este cuadro fue pintado por el más grande pintor de la Virgen, el señor Miguel Cabrera (1695 – 1768), de origen zapoteca, nació en Oaxaca; fue Presidente de la Academia de Bellas Artes en San Carlos, de la Ciudad de México. El cuadro fue restaurado por el Escultor y pintor Sr., Benigno Alba nativo de esta Ciudad y es muy notorio lo que el restauro de esa pintura.
El año de 1994 se hizo un estudio de este cuadro por restauradores y analistas del Instituto Zacatecano de Cultura, estudio que confirmó la autenticidad de la pintura.
SR. CURA PBRO. DON APOLINAR RUIZ LEAL
![]() El 14 de marzo de 1936, por disposición del M. I. Sr. Pro - Vicario don José Chávez, el Sr. Cura Pbro. Don Apolinar Ruiz se hizo cargo de la Administración de esta Parroquia de San Miguel, como Vicario Cooperador, siendo Párroco de San Juan del Mezquital y encargado también de Santa Clara, Dgo. (82
El Sr. Cura don Apolinar al hacerse cargo de esta Feligresía de San Miguel dio muestras de ser un amantísimo adorador de la Santísima Virgen de Guadalupe y preocupado por el estado tan deplorable en que se encontraba el Santuario dedicado a la Santísima Virgen a quien el tanto amaba.
Fue entonces que le hace ligeras reparaciones al Santuario que se encuentra a extramuros del pueblo, primeramente lo rescata del mal uso que le están dando pastores, arrieros y gente depravada que sin ningún respeto lo han tomado como corral, majada y baño. El Sr. Cura reúne a un grupo de personas amantes también de la Santísima Virgen, barren y retiran de este Sagrado Recinto toda la mugre que durante la fraticida Guerra Cristera se había acumulado en él.
El Sr. Cura para desagraviar tanta ofensa a la Sagrada Casa de la Santísima Madre de Dios, escribe a la Santa Mitra de la Diócesis de Durango, para pedirles permiso para oficiar una Santa Misa en este lugar que no tenía ni techo ni puertas; el permiso le fue concedido, por el Dr. Y Mtro. Don José María González y Valencia Arzobispo de esta Diócesis .
Pero las Autoridades Civiles de San Miguel le negaron ese derecho, no le permitieron decir la Misa allí, alegando que así lo determinaba la Secretaría se Gobernación, de no permitir en la vía pública u otros recintos no oficiales, reuniones masivas fueran del índole que fueran. Aún surgían brotes de violencia, perecía que ya estaba terminada la cristiada pero no, seguía habiendo mucha violencia en todo el País, era el re-acomodamiento del Sistema Político, el Religioso y Social. (83
La Santa Mitra al ver el fervor piadoso del Sr. Cura don Apolinar Ruiz, ha la Santísima Virgen de Guadalupe, lo hacen Administrador titular de esta Parroquia de San Miguel del Mezquital. Y oficialmente le hacen la entrega de esta feligresía.
NOMBRAMIENTO
Nos. el Dr. y Mtro. D. José María González
Por la Gracia de Dios y de la Santa Sede Apos-
tolica, Arzobispo de Durango.
Encontrándose vacante la parroquia de San Miguel
del Mezquital, Zac. y teniendo Conocidas las Prendas
de Celo, virtud, prudencia y abnegación del Sr. Pbro.
D. Apolinar Ruiz; por el tenor de las presentes, “etad
Normam Can. 458 et 446”, lo nombramos Párroco y
Vicario Foráneo de San Miguel del Mezquital con to-
dos los derechos y obligaciones que se mencionan en dichos
cánones y que se relacionan con la cura de almas.
Como pensión le señalamos la quinta parte
de las obvenciones parroquiales de la expresada parro-
quia de San Miguel del Mezquital en virtud de las
facultades que tenemos concedidas por la Sagrada Congre-
gacion del Concilio, con fecha 20 de marzo de 1934;
quinta que mandará mensualmente a la Secretaría
Arquiepiscopal, para la Sagrada Mitra y el Semi-
nario.
Le mandamos además que también mensual-
mente envíe las limosnas de los coros del Señor San José,
destinados al sostenimiento de los jóvenes seminaristas,
así como los aumentos que la Santa Sede concedió a favor
del Seminario.
Le encarecemos la atención a la Acción Ca-
tólica y al Catecismo tanto de niños como de adultos. Le
ordenamos también que forme un inventario de las cosas
pertenecientes al culto, y mande una copia de este docu-
mento a Nuestra Secretaría.
Dadas en Durango, firmadas de nuestra ma-
no y refrendadas por nuestro infrascrito Secretario de Cama-
ra y Gobierno, a los veinte días del mes de julio del año
del Señor; mil novecientos treinta y siete. (84
Por mandato del S. Excia. Revm.
José Chávez. Rubrica.
El señor Cura don Apolinar jamás quitó un pie del renglón, se le metió en la cabeza y en el corazón que tenía que rescatar y arreglar la Capilla de Ntra. Señora de Guadalupe y no nadamas eso, sino su visión futurista que probablemente le permitió ver al Santuario como es ahora. (Cito aquí integras las solicitudes y logros obtenidos por él.)
Santuario de Guadalupe en la población de San Miguel del Mezquital.
El edificio del Santuario Sitio en la colina a extramuros de esta población y dedicado a la Santísima Virgen de Guadalupe, se encuentra en ruinas y lo utilizan arbitrariamente como majada de ganado. Emprendí la reclamación y restauración para acondicionarlo al culto pero se me puso el óbice de que se necesitaba el permiso de la Dirección de Bienes Nacionales, a cargo de la Secretaría de Hacienda. y C . P.
Recurrí a la Secretaría de Hacienda y C. P. Basándome en las circulares de dicha Secretaría relativas a Templos y expedidas en 1929 y 1930,y ratificadas por la excitativa posterior de 1931, Num. 36 – 2 –175, sobre la obligación de conservar los Templos, Monumentos Arqueológicos de Arquitectura. Solicité aquiescencia en 15 de marzo de 1938 y la Secretaría de Hacienda y C. P. Me contestó en marzo 25 de 1938. (85
SOLICITUD DE AQUIESCENCIA PARA RESTAURAR EL SANTUARIO
Asunto: Solicitud de aquiescencia para la reparación de un Templo.
A la Dirección de Bienes Nacionales .
Secretaría de Hacienda y Crédito Publico.
México, D. F.
Con el debido respeto expongo ante Uds. Que en este pueblo de Miguel Auza, Zac. antes San Miguel del Mezquital, existe una capilla en ruinas con muros de adobe y techos deteriorados, dedicada al Culto Católico, situada en una colina al Este de ésta población considerada casi dentro del perímetro urbano.
Este edificio si no se repara y si no fuera frecuentemente visitado por los fieles llegará a un total aniquilamiento. Basándome en la excitativa de repetidas circulares expedidas por esa M. Secretaria en los años de 1929, 1930 y ratificada en la posterior Num.
30-2-175 del año de 1931, sobre la obligación de conservar los Templos y que se solicite, para las reparaciones la aquiescencia de la ley, la que esa Dirección de Bienes Nacionales Tramita con toda actividad, vengo a suplicar con toda atención se me permita emprender las imprescindibles reparaciones, en los muros y techos para evitar el derrumbe del inmueble; con los deberes de Párroco. Reitero a Hds. , las seguridades de mi respetuosa consideración.
Miguel Auza Zac. , marzo 15 de 1938.
El Cura encargado de esta.
También se concedió con gusto permiso para BINAR dos veces por semana al ir a los ranchos de esta. (86
Este documento que se sigue: la importantísima respuesta del Departamento de la Dirección Nacional de Bienes de la Nación, al comunicado expedido el 15 de Marzo de 1938 por el Sr. Cura Pbro., don Apolinar Ruiz.
Forma C. G. 2. 12-1292.
Dirección Nacional de Bienes Nacionales.
Sec. de Ing. y Arq. 302-111-5455.
223(724.1) 21120.
Asunto:
Se le concede permiso para las reparaciones necesarias del Templo Católico a su cuidado.
México, D. F., a 25de marzo de 1938.
C. Encargado del Templo Católico General no tiene inconveniente en conceder el permiso que solicita para llevar acabo en este templo a su cuidado, las reparaciones a que se refiere en su escrito arriba citado con la condición de que al efectuarse dichos trabajos, no se modifique en nada la estructura y este lo actual del mismo. (87
Atentamente Sufragio Efectivo no Reelección.
P. O. del Director El Subdirector
R. Pérez Ayala. Rubrica.
c. c. p. la Oficina de Hacienda
en Durango. Dgo., para su conocimiento.
J. N. V. /ege.
El Templo Santuario Guadalupano
Sitio en la colonia S. E. De esta población de San Miguel del Mezquital, Zac., he estado, siendo reconstituido. Estaba derruido, solo los muros estaban el pie se iniciaron las reparaciones con motivo del “ Año Santo Guadalupano, 1938.
A la fecha esta techado, enjarrado y blanqueado del interior.
Se le abrió una entrada lateral, con puerta. Se proyecta también ampliarla con un crucero-capilla, al lado de la epístola y utiliza la interior construcción de la sacristía, como crucero al lado del Evangelio.- D M.
Se reformaron en su mayor parte los arcos de los arcos, por que estaba dislocadas las piedras que los integraban.
San Miguel del Mezquital, Mayo de 1939. (88
El V. F. Apolinar Ruiz. Rubrica .
ERECCIÓN DEL VÍA CRUCIS
Tramites: En el santuario de Ntra. Señora de Guadalupe de esta Población.
Concesión de la Sagrada Mitra de Dgo.
Al margen un sello
Gobierno Ecco.
Arzobispado de Durango.
Habiendo acudido a Nos. el Señor Cura y Vic. For. D. Apolinar Ruiz Leal de la Parroquia de S. Miguel del Mezquital, Zac., en suplica de que elijamos Católicamente las estaciones del Vía Crucis en la Capilla de Ntra. Para bien espiritual de esa feligresía:
Nos. acordamos lo siguiente: 1º. elejimos las estaciones del Vía Crucis en el Templo de Nuestra Señora de Guadalupe de esa parroquia: 2º. Aprovechamos los tramites que se hagan para conseguir la delegación del Mtro. Rdo. Padre Provisional Franciscano José Maria Casillas-Independencia 43-Etzatlan, Jal. Para (la erección conseguir la delegación). Ratificamos la delegación que se, haga a la persona del Señor Cura de S. Miguel del Mezquital para eregir el Santo Vía crucis en la Iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe de esa Parroquia. Dios Ntro. Señor guarde a Ud. muchos años.
Dadas en la Ciudad de Durango, Dgo., a los dos días del mes de mayo del año del Señor mil novecientos treinta y nueve.
José N. Campos Faustino Contreras
Pro-Vicario General. Rubrica. Notario Publico. Rubrica.
Al Sr. Cura y Vic. For. D. Apolinar Ruiz, San Miguel del Mezquital, Zac.
Es copia del autentico y para que conteste:
Pbro. Apolinar Ruiz. Rubrica.
Acompañando la anterior se solicito oficialmente la concesión de delegación para la finalidad indicada del Mtro. Rdo. P. Provisional Franciscano. (89
RESPUESTA.- En respuesta a la solicitud relativa a la erección del Vía Crucis recibí la siguiente carta-(copia): Sayula, Jal,. Junio 5 de 1939.
Sr, Cura Pbro. D. Apolinar Ruiz
San Miguel del Mezquital, Zac,
Por ausencia de Ntro. P. Provisional, he quedado al frente de la Provincia hasta que regrese de Europa.
La erección Crónica del Santo Vía Crucis puede hacerla Personalmente el Excelentísimo Señor Arzobispo o cualquier Obispo, aunque sea titular.
Los superiores de la Orden Franciscana podemos delegar para dicha erección a algún otro Sacerdote pero solo Franciscano y no está en nuestras facultades el hacerlo a favor de un Sacerdote del Clero Secular. Próximamente tendrá
que ir a Durango, el Padre Superior de Elzatlán y si usted gusta y el tiene tiempo podrá aprovecharse esta ida para que establezca el Vía - Crucis que desea Ud. En este caso tenga la bondad de escribir o encargar a alguna persona para que le hable cuando esté en Durango. (90
Rdo. P. Guardián, Fr. Felipe Quevedo
Etzatlán, Jal.
N. B. Le escribí al Rdo. P. Quevedo solicitando venga a esta Parroquia de San Miguel. Además escribí al Sr. Pbro. Dr. don Miguel García Director de la V. O. J. En Durango, Dgo. Para que entreviste al R. P. Quevedo.
AUTORIZACIÓN PARA
LA ERECCIÓN DEL SANTO VIA CRUCIS
En el Santuario Guadalupano de San Miguel del Mezquital.
Siguillum Minus Provinciae S. S. Franc. Et Jacobi.
- Por las presentes autorizaciones al R. P. Fr. Felipe J. Quevedo, Superior de nuestro Convento de Etzatlán, Jal., para erigir Canónicamente las Estaciones del Santo Vía Crucis, en la Capilla de Nuestra Señora de Guadalupe de la Parroquia de San Miguel del Mezquital, Zac., del Arzobispado de Durango.
Convento de Nuestra Señora de Guadalupe.
Sayula, Jal., Julio 5 de 1939.
Fr. Antonio M. Gómez
O. F. M.
Delegado Provincial.
ERECCION DEL SANTO VIA CRUCIS.- El Santuario Guadalupano de San Miguel del Mezquital, zac., Arzobispado de Durango.
DIGOSE FACULTATIS MICHI CONMIRSAE, EGO FR. PHILIPPUS a J. QUEVEDO VIAM CRUCIS CUM ADUCXIS INDULGENTIS EREXI IN LOCU UT SUPRA IN PRECIBUS (PRECIBRES) JUXTA REGULAS A. S. INDULGENTIASUM CONGREGATIONE DIE 10 MAYO 1742 PRAESCRIPTAS (PRAEXRIPTAS).
IN GAORUM LIDEM (SLIDEM) TESTIMONIUM HOC MEANARUS EXARAUS (EXARAVS) HOC DIE 24 JUNI 1939. (91
FR. PHILIPPUS a J. QUEVEDO
O. F. M.
DELEGADO PROVINCIAL.
También en el mes de mayo se solicitó del Excelentísimo Sr. Metropolitano la Bendición del Santuario de Guadalupe.
BENDICIÓN DEL SANTUARIO GUADALUPANO.
El día (29) veintinueve de Sepbre. Del año del señor (1939) mil novecientos treinta y nueve, siendo las 9.00, A. M., y estando presentes los Sacerdotes: Sr. Cura y Vicario Foráneo de Río Grande, Zac. Pbro. D. M. Barraza, el Sr. Cura Párroco de S. Juan del Mezquital Pbro. Don Heriberto Morales, el Sr. Cura Don Juan Alcázar Párroco de Santa Maria de las Nieves, Zac., el Sr. Pbro.
Dr. Don Luis Cortina y el Sr. Pbro. P. Sostenes Moreno, el suscrito Cura y Vicario Foráneo de esta Arcipreslazga, Procedió-usando la autorización que me otorgo su Excelencia, el Sr. Dr., y Maestro, José María González y Valencia dignísimo Arzobispo de Durango, Dgo., Méx. Procedí ala bendición del Santuario de Ntra. Señora de Guadalupe, sitio al S. F. de esta Población, usando para la ceremonia el Rito del Ritual Romano.
Acto continuo hubo una Solemne misa cantada con Ministros, Presentes los tres Sacerdotes antes mencionados; estando pletórico el Sagrado recinto por fieles de esta ciudad de los lugares foráneos de esta feligresía si como de Ignacio Allende, de San Juan del Mezquital, de Torreón y de la Ciudad de Durango. Presenciaron el acto en la ciudad de padrinos, los medico Dres. Agustín Ursua Sánchez, Dr. Reyes Avilés, Dr. Luis G Bonilla. (92
SOLICITUD DE PERMISO PARA LA ESPOSICIÓN EN EL AÑO DE 1940
Excelentísimo y Rmo. Señor:
Respetuosamente suplico a V. Excelencia se dirige otorgar el permiso necesario para exponer, a la adoración Publica de las fieles a su Divina Majestad en el presente año.
En el Santuario Guadalupano de esta Población el día doce de cada mes. (93
El Párroco Pbro. Apolinar Ruiz
Rubrica.
El Señor. Cura Pbro. don Apolinar Ruiz Leal valientemente y con maravilloso fervor Guadalupano se hecho acuestas el rescatar de la total destrucción el Santuario, Casa de Nuestra Señora de Guadalupe que hoy tanto nos llena de orgullo y alegría, esperamos la llegada de los Peregrino de otras feligresías, con sus danzas autóctonas tan maravillosas como: Los Matlachines, La Pluma, Los Pardos etc. y el día 11 de diciembre la peregrinación de señores, jóvenes y niños a caballo, llegan de sus comunidades rurales y ranchos, como una imagen plural de las columnas de la Revolución, que al verlos llenan de emoción, admiración y mucho respeto de adormecido cariño a nuestra gente del Campo, el fervor con el cual estudian y practican todo el año, sones y pasos por los que el Viejo de la danza los guiara por las calles de este historico San Miguel del Mezquital, Zac., ( hoy Miguel Auza).
Cuanta emoción el Sr. Cura Pbro. don Apolinar Ruiz sentirá cuando asoma su mirada por las ventanas del Cielo y mirara su Capilla de Nuestra Señora de Guadalupe y su Plaza, todo pavimentado, con adoquín y lleno deárboles. Como un día el lo soñó.
El Padre don Apolinar Ruiz luchando incansable después que rescatara de la destrucción el Sagrado recinto restaurándolo, recurre a la Autoridad Civil correspondiente pera ampliarla y embellecer mas la Capilla y envía a las Autoridades Municipales esta misma:
H. Ayuntamiento Municipal Presente.
Apolinar Ruiz, Presbítero Encargado del Templo Parroquial de esta Población ante ese R. Cuerpo con el debido respeto y como mejor proceda en derecho comparezco para exponer:
Que la Secretaria de Hacienda y Crédito Publico por conducto de su Dirección General de Bienes Nacionales, en Oficio numero 302-11-5455, Expediente 223 8724.1) 21120, de fecha 25 de marzo del año próximo pasado, a petición que le fue formulada, me concedió autorización para reconstruir el Anexo del Templo que esta boja mi cuidado y cual se concedió con le nombre de la “ La Capilla” hoy Santuario de Guadalupe, y de acuerdo con dicha autorización se están llevando al cabo estos trabajos; pero como tengo conocimientos que el terreno donde se encuentra el Edificio así como también el que lo circunda es de propiedad municipal, y pido con objeto que tenga siempre amplitud permanente este Edificio, le sea cedida al Gobierno Federal una porción de dicho terreno con las siguientes medidas y colindancias: por el noroeste mide cincuenta metros (50 Mt.), y colinda con la ladera de Cerrito; por el noreste mide ciento sesenta metros (160, Mt.), y colinda con camino carretero; por el Sureste mida cien metros (100, Mt.), y colinda con terreno municipal, y por el Suroeste mide ciento sesenta metros (160, Mt.), colinda con pertenencia de varios vecinos. (94
Protesto a ese H. Cuerpo las seguridades de mis respetos.
Miguel Auza, Zac., junio 22 de 1939.
El Presbítero encargado del Templo
Rubrica
Un sello que dice:
Presidencia Municipal Numero 315
Miguel Auza, Zac. Asunto:
Comunicando Acuerdo de H. Ayuntamiento en relación con su petición que se cita.
Al Presbítero Apaliar Ruiz encargado del Templo Parroquial.
Presente
El H. Ayuntamiento que honro en presidir, en su Sesión Ordinaria del día primero de junio del presente año, a quien se dio cuenta con se petición relativa fechada el 22 de junio de este mismo año, tuvo a bien aprobar el siguiente.
Acuerdo:
Dígase al Presbítero Encargado del Templo Parroquial de este lugar, en contestación de su situación de su solicitud relativa, que este H. Ayuntamiento no puede hacer cesión al Gobierno Federal del terreno que solicita, pero en cambio concede el uso exclusivo por todo el tiempo necesario en que el Edificio llamado hoy “Santuario Guadalupano” se conserve, con la recomendación muy especial de procurar desde luego el acondicionamiento y reforestación del terreno de que se trata. (95
Lo que se transcribe a usted pera sus conocimiento y fines.
Sufragio Efectivo no Reelección
Miguel Auza Zac. a 21 de Noviembre de 1939.
El Presidente Municipal Secretario
Juan F. Salas. Rubrica. Eliseo Ávila y Ruelas. Rubrica.
Siendo Sr. Cura y Vicario Foráneo el Pbro. don Apolinar Ruiz Leal, de la Parroquia de San Juan del Mezquital, el día 14 de marzo de 1936 se le designo también Vicario Cooperador de la Parroquia de San Miguel del Mezquital, encontrando el Sr. Cura Ruiz en esta feligresía una Capilla en ruinas dedicada a Nuestra Señora de Guadalupe. El Señor Cura en su visión espiritual, tal ves miro lo maravilloso que llegaría a ser el futuro de este Santuario parar las próximas generaciones de Guadalupanos.
El día 20 de junio de 1937 se le dio su nombramiento como titular de esta parroquia de San Miguel que tanto amo, desde que fuera Vicario Cooperador.
El Señor Cura Pbro. don Apolinar Ruiz, valiente y con maravilloso Fervor Guadalupano se hecho a cuestas rescatar de la destrucción total el Sagrado Recinto y restaurarlo, su maravillosa visión espiritual lo llevo a mirar un Santuario Guadalupano, como ahora es, ¿Por qué con tanto fervor busco la donación del terreno que rodea al Santuario y con tanta facilidad se le cediera? Si en ese entonces la relación del Gobierno y la Iglesia era incierta, pero con fe y tesón el Padre Ruiz lo consiguió.
MUERTE DEL SEÑOR CURA RUIZ
Desgraciadamente o atinadamente todo lo que vive muere.
El día 31 de octubre de1956, el telégrafo trajo la trágica noticia de la muerte del Sr. Cura Párroco don Apolinar Ruiz, acaecida ese mismo día en la Ciudad de Durango. Esta noticia lleno de pesar a toda la población que se le dificultaba creer tan fatal noticia. Si apenas hacia dos días, el Sr. Cura había salido para Cuauhtémoc,Dgo., sin dar muestras de algún padecimiento que hiciera creer un próximo deceso. El Reverendo Padre José Villarreal, acompañado de los Sres. Ignacio L. Aguilera y Miguel de J, García, ambos compañeros Rotarios, se trasladaron inmediatamente a la Ciudad de Durango, para hacer las gestiones necesarias para el traslado de sus restos mortales a Miguel Auza, Zac., de tan querido Sacerdote, gracias a la actividad desempeñada por dicha comisión, lograron traer los restos del Sr. Cura, el día 11 de Noviembre, fue velado por personas de todas las clases sociales hasta el día siguiente que se celebro solemne misa de réquiem con cuerpo presente, la que oficiaron el Sr. Canónigo H. Dn. Margarito Barraza, y los Rvs. Padres Sres. José Villareal y Heriberto Mier.
Terminadas estas ceremonia se precedió a dar Cristiana sepultura en la misma Parroquia y al pie del Altar Mayor ha los restos mortales de quien fuera ten querido, el Sr. Cura Pbro. don Apolinar Ruiz Leal. (96
EMBLANSA BIOGRAFICA DEL PBRO. D. APOLINAR RUIZ LEAL El Padre Pbro. don Apolinar Ruiz Leal, nació el año de 1870, en la Ciudad de Durango, sus padres fueron don Isaac Ruiz y la Sra. Ma. De Jesús Leal.
Sus primeros años transcurrieron con la sencillez e inocencia propias de la edad. Sintió la vocación sacerdotal desde su tierna infancia, solo que hasta 1881, cumplido 11 años ingreso al Seminario Conciliar de Durango.
Inmediatamente se capto la simpatía de los Profesores cuando mas tarde en los estudios de filosofía demostró una profundidad de pensamiento, que le valió presentar año con año el acto de Honor, mención con que se premia al discípulo mas aventajado. Comenzaba a estudiar Teología cuando los superiores le asignaron la Cátedra de filosofía, la que desempeño con la gravedad de un académico durante 4 años consecutivos; de esta manera, catedrático y estudiante, robaba les horas al sueño y al recreo para entregarse completamente al estudio y estar bien preparado para el buen desempeño de sus deberes. Así fue el Sr. Cura Ruiz, alimentado con el Augusto Sacramento refrigerio del Alma y alivio del Caminante.
En esta forma se acerca a recibir las Sacras Ordenes y la Unción Sacerdotal el 29 de septiembre de 1903 en la Parroquia de Santa Ana de la C. de Durango.
El Ilustre y Honorable Presbítero don Apolinar Ruiz Leal, como padre cariñoso de los sanmigueleños , y como barón ilustre merece; no estar bajo la lapida mortuoria y convertido en cenizas; si no que vive en nuestros corazones convertido en amor, honra, admiración y respeto. (97
De el Padre Ruiz fueron exhumados sus restos de la nave central donde se encontraba, al pie del Altar mayor, se hizo a si por respeto a él, pues toda persona que tenia que pasar por ese pasillo, pisoteaba su tumba; ahora sus restos se encuentran junto a la pared del lado izquierdo del Templo entrando, a la misma altura y nivel que su tumba anterior.
PLAZA GUADALUPE
Dice el Ing. Cecilio Talamantes R:
Todo empezó un 12 de Diciembre de 1993. después de 35 años de ausencia de mi pueblo, era el primer 12 de Diciembre que pasaba aquí nuevamente. Parado junto al Templo de Guadalupe viendo la danza, hacia frió pero lo mas molesto era el viento que pegaba muy fuerte y no era tanto eso, si no lo polvarera y tierra que arrastraba, hacían los danzantes esfuerzos desesperados para no perder el ritmo, cada vez que las rachas de viento frió y polvo arreciaban.
Cuando llegó el Sr. Javier Padilla Salas que al verme se acerco a saludarme y le dije: se me ocurre, ¿que todo este espacio estuviera lleno de árboles y con andadores adoquinados y las explanada par la danza y publico, todo pavimentado; vendría mas gente a la fiesta de la Virgen?.
¡Si lo hiciéramos entre todos!... ¿usted cooperaría, la gente cooperaría? – le pregunte, - si claro- me dijo, ¿Pero quien se atrevería echarse a cuestas una obra de esta naturaleza?... sin pensarlo mucho le dije, ¡ yo!.
Finalmente pensamos que la persona indicada para encabezar el proyecto sería el Sr. Cura Pbro. Teobaldo Hernández. Pero rehusó encabezarlo diciendo, - yo conozco puras viejitas, para eso se necesitan los hombres, yo les ayudo, les hecho porras, pero no me comprometo a más, ya traigo varias obras de capillas; lo cual era cierto.
Primera Reunión.
El Sr. Cura invitó para una reunión de información, la cual se llevó a cavo el día Sábado 28 de Enero de 1994, en la casa parroquial, con asistencia de 15 personas.
Sin recursos el proyecto presentado incluía un organigrama de puestos con sus respectivas funciones y un programa de obra, donde se detallaba lo que se haría cada día desde el primero de Febrero hasta el 10 de Diciembre, día que debía de Inaugurarse.
Al día siguiente Domingo 29, nos volvimos a reunir. En esta Reunión ,quedó claro que el Lunes primero de Febrero iniciábamos.
Para seguir adelante, la idea era involucrar a toda la Ciudad organizada por un patronato, ¿De donde sacaríamos los recursos?. Había que hacer un plan de actividades constantes durante diez meses para sacar los fondos necesarios, desde vender tamales, tacos, garnachas, pedir un peso casa por casa, organizar charreadas, festivales artísticos, etc. Así estuvimos día tras día, pero entre más avanzamos la gente nos ayudaba y nos animaba.
Para no desanimar a la gente a que siguiera cooperando había que ser transparentes, así cada semana informábamos a la ciudadanía el origen y aplicación de los recursos, desde quien aportaba un peso, cien pesos o materiales.
Cada semana nos reuníamos para que cada quien informara sobre lo que tenía encomendado, así el Comité de Obra informaba del avance y se medía contra el programa ya establecido. El Comité de Materiales, igual el Tesorero, en fin cada uno cumplió bien con su responsabilidad.
Lo más penoso era traer la piedra, necesitábamos 180 toneladas, localizamos el banco de piedra en el Cerro de la Mesa en la propiedad de don Alejandro Bautista, quien nos dio el permiso para extraerla. Hubo que hacer camino y un vado en el arroyo para poder llegar con los camiones hasta arriba del cerro.
Los Sábados por medió de un carro de sonido invitábamos a la gente que quisiera ayudarnos a sacar piedra y los que tuvieran camión se presentaran el Domingo por la mañana, muchos lo hacían y transportaban la piedra con mucho animo y gusto, de esa forma cada Domingo se acarreaba la piedra para toda la semana.
La obra nunca se paró ni un día por falta de material o mano de obra, porque a parte del material que se compraba no faltaba quien llegaba con un viaje de arena o grava, con bultos de cemento, otros iban a trabajar gratis a la obra. Cuando andábamos sacando la piedra y cargándola en los camiones llegaban las señoras cargadas con cazuelas de guisados y canastos de gorditas rellenas de diferentes guisados, pero, las que todos querían y se terminaban bien pronto, eran las de carne de cerdo con nopalitos en chile colorado; la verdad es que disfrutamos mucho de hacer lo que andábamos realizando en bien de esta Ciudad Guadalupana.
Así transcurrían los días y meses trabajando y luchando con todo, con tal de conseguir nuestra meta, como cuando nos enfrentamos a las Autoridades Municipales por que no nos querían dar la administración de la FEREMA (Feria Regional de Miguel Auza) y los retamos a una Reunión Publica de Cabildo a realizarse en la Plaza de Armas, cuando las Autoridades vieron que estábamos dispuestos a todo, ellos cedieron y nos dieron la Feria, era ya el mes de Septiembre.
Y llegó el mes de Diciembre, parecía que alcanzaríamos la meta fijada, de terminar la Plaza Guadalupe, 2 días antes del 12, día de Nuestra Señora de Guadalupe. Faltaban 10 días; y el Sr. Cura le dijo al Ingeniero Chilo.- No te preocupes, si no se termina, ya se terminará para Enero. Faltaba colocar el piso, retirar montones de escombro, cimbras, etc. A lo que el Ingeniero Cecilio le contestó, citando algo de la Biblia, ¡Hombre de poca fe¡. Dijimos que terminaríamos y terminaremos. Ya hasta las Invitaciones tenemos para la Inauguración el día 10. Y así fue, gracias a que siempre sentimos que nuestra Reina la Virgen de Guadalupe siempre estuvo con nosotros, aliviándonos del cansancio y dándonos mucha fuerza; porque a ella le dedicamos la obra, para que adornara y embelleciera mucho más su Templo.
Todos los que trabajamos o cooperamos en esto, nadie acepta que se lo agradezcan, al contrario todos se sienten agradecidos de haber participado, a tal grado que cuando terminamos quise darles las gracias,-dice el Ingeniero Cecilio,- no las aceptaron y decidieron, que siguiéramos unidos trabajando en otros proyectos para el engrandecimiento de la Ciudad de Miguel Auza, Zac.
Por esto, orgullosamente nos hacemos llamar; “Patronato de la Plaza Guadalupe”. (98
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